Tú, que viajaste entre pestañas desconocidas, para hacerme sentir mariposas.
Ven a mis días como viniste a mi sueño,
ven a mis noches.
Dime que la angustia por amarme
es muy grande;
cálmala con un beso...
Ven a mí con tu lengua suave,
viaja a mi estómago,
inúndalo.
camina conmigo en silencio,
termina de llenar mis domingos.
Ponle tu nombre al vacío.
Ven a mis días,
como has venido a mi sueño.